¿Quieres las buenas noticias o las malas primero? Lamentablemente, no podemos oírte, así que empezaremos por lo bueno y pasaremos a lo malo en un momento. Se trata del Mazda CX-60 de 2022, un SUV crossover híbrido que combina una impresionante potencia total con un impresionante ahorro de combustible (si lo enchufas a menudo, claro). Las cifras son impresionantes, al igual que la última evolución del lenguaje de diseño Kodo de la compañía, que parece más premium que nunca.
¡Potencia!
Empecemos por el tren motriz PHEV. Combina el conocido motor de gasolina I-4 de 2,5 litros de la compañía con un motor eléctrico de 100 kilovatios y un paquete de baterías de 17,8 kWh para obtener un total de 323 CV. Según Mazda, esto lo convierte en el coche más potente que ha producido la compañía. Y con un sprint de 5,8 segundos hasta las 62 mph, este Mazda tampoco será lento para salir en los semáforos.
Mazda también afirma que este PHEV puede recorrer 35 millas con energía eléctrica pura antes de que el motor de gasolina se encienda y funcione en tándem con el motor eléctrico como un híbrido. Sus cifras de consumo y emisiones también son impresionantes. Y en el futuro, el CX-60 contará con varias motorizaciones opcionales, como un I-6 e-Skyactiv-X de 3,0 litros y un diésel Skyactiv-D de 3,3 litros, ambos equipados con sistemas híbridos suaves de 48 V que Mazda denomina M Hybrid Boost.
El CX-60 estará equipado con i-Activ AWD, pero cuando lleguen los I-6 tendrán capacidad de tracción trasera. El CX-60 PHEV puede incluso remolcar más de 5.500 libras.
Diseño Kodo
El CX-60 es un SUV bien formado con unas proporciones que llaman la atención sobre la nueva arquitectura basada en la tracción trasera de una manera enorme. La larga capucha y el corto voladizo delantero le dan un aspecto elegante. La nueva rejilla del radiador tiene una textura de primera calidad que se ve resaltada por su contorno brillante y la interesante posición de las luces bajas desviadas/integradas.
En la parte trasera las cosas son bonitas, aunque un poco genéricas. Sin emblemas, podría ser un Infiniti o un BMW. Los cuatro escapes romboidales son un buen detalle y están muy bien integrados en la parte trasera. Los reflectores cromados y los embellecedores de los guardabarros añaden un poco de brillo a los flancos.
El interior es el típicamente moderno de Mazda, pero el salpicadero adquiere un aspecto multicapa con elementos horizontales apilados, algunos de los cuales rodean y ocultan parcialmente la amplia pantalla de infoentretenimiento. En algunas especificaciones se utilizarán tejidos y maderas interesantes, lo que le dará un poco más de carácter que el aspecto más bien anodino que presentan sus fotos. Por cierto, el CX-60 es un coche con dos filas de asientos, a pesar de ser unos 15 centímetros más largo que el Mazda CX-5 que se comercializa en nuestro mercado en 2022.
¿Qué significa esto para nosotros?
Si todo esto suena demasiado fantasioso para un próximo Mazda en el mercado americano, estás en lo cierto. La mala noticia es que no tendremos el CX-60. Lo que sí tendremos es el CX-70, un poco más grande, que se acoplará al CX-60 y compartirá muchas de sus motorizaciones. Es poco probable que ninguno de esos I-6 llegue a estas costas, pero es posible que aparezca un I-6 de gasolina sin Skyactiv-X con la misma cilindrada de 3,0 litros. Mientras tanto, es una apuesta segura que nuestro CX-70 PHEV igualará o superará los 323 CV del CX-60.
Así que, buenas y malas noticias, y algo que esperar.