Como en años anteriores, en el Salón del Automóvil de Múnich 2023 hubo protestas de grupos ecologistas contra la industria automovilística. Esto ocurre en todos los salones del automóvil, pero esta vez se hizo de una forma inusual. Decidieron quemar coches eléctricos.
Su objetivo eran diez Tesla Model Y (que, no lo olvidemos, han sido los coches más vendidos en Europa este año). Según los bomberos, fueron llamados a un incendio en Vechtersbacher en la madrugada del martes 12 de septiembre, a las 3.20 horas.
40 dotaciones y cinco camiones de bomberos tardaron dos horas en extinguir el fuego. A las 16.30 horas el incendio estaba controlado y algunos de los vehículos habían empezado a ser retirados, pero los equipos de rescate seguían vigilando la zona, ya que existía el riesgo de que las baterías, al tratarse de vehículos eléctricos, volvieran a incendiarse.
El mismo día, un grupo anónimo publicó un comunicado en el sitio web Indymedia reivindicando la autoría de estos incidentes, bajo el titular "Tesla flambé" (Tesla está ardiendo), en el que se leía: "En las ferias de este verano, empresas de todo tipo se encuentran en salas de conferencias con aire acondicionado, limusinas y salas de exposición. coches fantásticos y relucientes para presumir y celebrar su éxito económico", al tiempo que criticaba a la IAA223 por los incendios e inundaciones en otras partes del mundo.
Y añadió: "Tesla es uno de nuestros enemigos más formidables. La empresa es un emblema único de la ideología del capitalismo verde y de la destrucción global y colonial en curso". ¿El motivo? El hecho de que "los motores eléctricos se presentan siempre como una alternativa limpia. Esto es una cínica mentira. Al igual que otras empresas, Tesla utiliza recursos de todo el mundo. Materias primas como el litio y el cobalto, necesarias para las baterías de los coches eléctricos, se extraen en pésimas condiciones en América Latina y África. Son grandes y ecológicas, pero requieren combustibles fósiles para su transporte y producción".
Para ello, prendieron fuego a los puntos de venta de la marca estadounidense, causando daños por valor de 500.000 euros, según estimaciones policiales.
