Las ciudades no sólo se preocupan por las consecuencias del aumento de peso que han experimentado los vehículos en los últimos años. También vigilan de cerca a los vehículos comerciales que sobrepasan sus límites de carga. Para hacer frente a esta situación, se ha introducido un nuevo dispositivo llamado radar de peso.
Este dispositivo cuenta con una serie de sensores que pueden vigilar el sobrepeso de los vehículos de carga. Ya está en funcionamiento en la ciudad de Nueva York, según ha confirmado el Departamento de Transporte de la ciudad en las redes sociales. Se trata de una iniciativa que podría replicarse en otras ciudades.
El programa se llama "BQE Weigh-In-Motion" y pretende detener a los vehículos industriales que no cumplan los límites máximos de carga. ¿De qué manera? Mediante el control del peso, que comprueba el número de kilómetros que recorren los vehículos de carga en la autopista Brooklyn-Queens Expressway (BQE).
Radar para controlar el peso
Para ello, estos dispositivos están equipados con cámaras que pueden leer las matrículas. También están equipados con detectores que comprueban el peso bruto y el peso por eje del vehículo en cada trayecto. Es una forma ingeniosa de realizar este control sin que cada vehículo de carga tenga que pasar por una báscula convencional.
Quienes no respeten los límites de peso de Nueva York serán sancionados y la multa reflejará el número de infracciones: durante 90 días a partir del 10 de agosto, los conductores sólo recibirán un aviso, tras el cual serán multados con 650 dólares (600 euros al cambio actual).
Por ahora, las cámaras de pesaje sólo se utilizarán en el tramo más problemático de la autopista, es decir, el que discurre bajo el paseo de Brooklyn Heights. La instalación de los equipos restantes, que cubrirán todo el trazado, concluirá a finales de año.
Vehículos más pesados
No es la primera vez que se producen problemas similares en Nueva York. Hace unos meses se derrumbó un aparcamiento de cuatro plantas en el Bajo Manhattan. De hecho, el peso de los vehículos modernos, especialmente los eléctricos, supone un peligro para estos viejos aparcamientos.
En medio siglo, el peso de los coches más comunes en Europa ha aumentado un 57%: en 1990, el peso medio de un turismo era de 1 020 kg; 20 años después, en 2010, había aumentado a 1 380 kg.
Las razones de este aumento pueden atribuirse al mayor tamaño de los tipos de vehículos en todas las categorías, así como a la introducción de una serie de sistemas de seguridad que ahora son obligatorios por ley.
Además, el equipamiento y la seguridad han obligado a las marcas a reforzar las estructuras del chasis y los paneles de la carrocería con componentes protectores de alta resistencia, lo que ha aumentado el peso total del conjunto y el fenómeno SUV.
Los SUV en el punto de mira
En algunos países, los SUV están en el punto de mira: consumen más combustible y emiten más gases contaminantes debido a su mayor tamaño. Por esta razón, Francia se ha convertido en el primer país europeo en introducir impuestos más elevados para los SUV.
A partir de enero de 2022, se aplicará un impuesto especial a los turismos nuevos con un peso en vacío superior a 1,8 toneladas. Esto significa que los SUV grandes de unas 2 toneladas tendrán que hacer frente a un recargo de 2.000 euros en algunos casos.
