Muchos concesionarios de motos usadas de renombre ofrecen una garantía de calidad para sus productos. Sin embargo, no siempre es así. Incluso si vas a comprar una moto a un amigo o conocido, hay algunas cosas que debes tener en cuenta. Tu amigo no tiene intención de engañarte, pero puede que ni siquiera sea consciente de los posibles problemas de su "querida" moto.
Consejos para comprar una moto usada
1. ¿Es correcto el kilometraje de la moto?
Esto nunca es fácil de determinar, pero hay algunos consejos.
Uno de ellos es que el cable del cuentakilómetros no esté roto. También hay que comprobar el estado de las manetas de los puños y los estribos.
El estado del sillín y las zonas de roce de las botas pueden dar una idea aproximada de si la moto se ha usado más o menos a menudo.
Las llantas también esconden muchos secretos. Si la llanta exterior tiene muchos agujeros, la rueda ha sido sustituida más a menudo, lo que significa que se han recorrido más kilómetros. Comprueba también si la rueda tiene demasiado contrapeso para equilibrarse. Si los hay, significa que la moto ha sido revisada varias veces.
También deben comprobarse los rodamientos de la dirección y de las ruedas. Los discos de freno son otro elemento importante a comprobar. En este caso, asegúrate de que su estado coincide con el kilometraje. Una sustitución prematura puede enmascarar un accidente.
2. Estado del motor
No es posible saberlo con seguridad sin desmontar la moto, pero hay algunos consejos.
En primer lugar, la moto debe arrancar fácilmente en frío. Si la moto está caliente, espera el tiempo necesario, pero comprueba por ti mismo el arranque en frío.
Tras el calentamiento, comprueba si hay fugas de aceite o agua y si sale humo del tubo de escape. Debe ser casi transparente; si es demasiado blanco, hay un problema.
3. Piezas del ciclo
Comprueba que las soldaduras y la pintura son buenas y visibles de fábrica. Si el tamaño o el color de alguna de ellas no coincide con el resto de piezas de la moto, es muy probable que se haya ocultado un accidente.
El estado de las ruedas también es fácil de detectar. Sin embargo, si observas deformaciones por desgaste, puede deberse a un fallo del cuadro o de la suspensión, o bien a circular con una presión inadecuada.
4. pruebas en carretera
Sin duda, es muy importante poder probar la moto en carretera. Por desgracia, no es fácil probar una moto usada. Esto se debe a que muchas motos no están aseguradas cuando las compras en una tienda. En el caso de los particulares, muchas motos han sido robadas con estos pretextos.
Usa tu imaginación. En el primer caso, puedes al menos preguntar si hay algún aparcamiento para realizar la prueba de conducción; en el segundo, deja algo al vendedor como señal de que la devolverás o llévatelo de paquete.
Tampoco es necesario correr un gran trayecto. Basta con recorrer unos metros para comprobar las características generales y si hay ruidos extraños.