¿Recuerdas la noticia en la que un hombre que había denunciado el robo de su coche lo encontró a pocos metros de donde lo había aparcado? ¿Qué ocurrió? Sencillo: el conductor se olvidó de poner el freno de mano al salir del coche. Aunque se trate de un ejemplo un poco exagerado, las consecuencias de no mantener los frenos en buen estado pueden ser devastadoras.
Cuesta creer que un mecanismo tan simple como el freno de mano cumpla una función tan importante como el mantenimiento del coche, pero al ser un mecanismo tan sencillo, nosotros mismos podemos prevenir un pequeño problema de aflojamiento.
Cómo saber si el freno de mano está desajustado
Es muy fácil comprobar si el freno de mano está flojo. No hay duda de que si la distancia recorrida al tirar de él con la palanca es muy grande, el cable se aflojará, lo que significa que cada vez tendrá menos fuerza para sujetar el coche, lo que es especialmente importante al aparcar en una pendiente.
Para tensar el cable, lo más práctico es elevar el vehículo con un gato para poder localizar los cables de freno, que se encuentran en dirección a las ruedas traseras y están compuestos por unas varillas y una tuerca.
Una vez que hayas encontrado la posición correcta, lo único que tienes que hacer es tensar el cable ejerciendo presión sobre la tuerca de ajuste mencionada anteriormente. Para hacerlo, abre la tapa del freno de mano en el interior del coche y haz lo mismo con la tuerca de bloqueo que hay allí.
Esta sencilla maniobra te ahorrará unos cuantos euros en el taller, pero hay que tener en cuenta dos cosas. La primera es que no conviene apretar demasiado los frenos, porque si están demasiado apretados quedarán inservibles, y la solución es tan sencilla como aflojar un poco la citada llave.
El segundo y último punto a tener en cuenta es que estamos hablando de vehículos equipados con freno de mano mecánico, un sistema que ha empezado a desaparecer con la llegada del freno de mano eléctrico. Si tienes algún problema con este tipo de dispositivo que estás montando, no te queda más remedio que acudir al taller adecuado.
