El auge de las motocicletas modernas con estilo retro está influyendo no sólo en marcas premium como BMW, Ducati, Kawasaki y, por supuesto, Triumph, cuya gama de motocicletas hará las delicias de cualquiera que busque una moto con mucho estilo sin recurrir a los sacrificios inherentes a las clásicas, especialmente con un uso frecuente.
La tendencia actual hacia el estilo retro y cafe racer la pagan principalmente los fabricantes de motos más baratas y modestas, incluso 125 que, como en este caso, se pueden conducir con carné B.
En esta línea está la Brixton Crossfire 125, una moto naked de estilo retro que se puede conducir con carné de conducir, y por menos de 4.000 euros.
Brixton Motorcycles pertenece al grupo austriaco KSR, que diseña y desarrolla sus motos en Krems-Gedersdorf (Austria) y subcontrata la producción a fábricas de China.
Aparte de su estética, la Brixton Crossfire 125 es una opción interesante para una moto urbana y de uso diario, ya que alcanza una velocidad máxima de 99 km/h. Está propulsada por un motor monocilíndrico de 124 cc y cuatro tiempos con refrigeración líquida e inyección electrónica de combustible. La potencia es de 13,5 CV a 9.500 rpm y el par máximo es de 11,4 Nm a 7.500 rpm.
El consumo de combustible es razonable, 2,6 l/100 km, lo que aumenta su autonomía teórica a 400 km gracias al depósito de combustible de 11 litros. Tiene neumáticos delanteros de 120/70-18 y traseros de 140/70-17, frenos de disco hidráulicos con ABS y un peso total de 149 kg en orden de marcha.
La motocicleta tiene un precio de partida de 3.999 € y está disponible en dos acabados, con el depósito en Charly Brown Matt o Bullet Silver. Además, Brixton Motorcycles cuenta con una red de distribución que cubre todo el país, incluidas las islas.