Un correcto mantenimiento del motor es esencial para el buen funcionamiento de coches y motos y para garantizar la seguridad de los usuarios. Toda inversión realizada en su cuidado contribuye a alargar su vida útil, además de traducirse en beneficios operativos.
Para mantener el motor en óptimas condiciones, los especialistas expertos en lubricantes de alto rendimiento, recomiendan formas adecuadas de cuidar y mejorar el estado de los motores de coches y motos.
Consejos para mejorar el rendimiento del motor
1.- Realizar un correcto cambio de aceite
Los cambios de aceite a tiempo permiten una buena lubricación, lo que previene el desgaste y ayuda a que el motor funcione de manera más eficiente.
2.- Comprueba regularmente los niveles de anticongelante
Una de las mejores formas de evitar que el motor de tu vehículo se sobrecaliente es vigilar la cantidad y el tipo de anticongelante.
3.- Mantener el motor limpio
Un motor limpio es un motor más eficiente, además de ser de gran ayuda para detectar posibles fugas.
4.- Cambia los filtros de aceite, aire y combustible.
Estos elementos atrapan las partículas o impurezas para que el aceite y el aire fluyan limpiamente y el combustible se queme con mayor facilidad.
5.- Utiliza combustibles de calidad
Además de un buen aceite para el mantenimiento del motor, utilizar combustible de calidad ayudará a alargar la vida del motor.
6.- Elige la viscosidad de aceite correcta
Para motores nuevos o con poco desgaste, debe usarse una viscosidad baja; para motores con más desgaste, debe usarse una viscosidad más alta.
Seleccionar la viscosidad correcta del aceite asegura un mejor rendimiento del motor y una mayor eficiencia sin necesidad de aditivos.
7.- Utiliza el aceite adecuado para el motor.
El aceite de moto lubrica tanto el motor como la transmisión y, en algunos modelos, el embrague.
El aceite de automoción lubrica sólo el motor, por lo que no tiene el aditivo extra de fricción que se necesita en una moto.
8.- ¿Aceite sintético o semisintético?
Los aceites semisintéticos son una combinación de aceites de base mineral y aceites de base sintética.
Los aceites sintéticos se producen por síntesis química, lo que produce un aceite más resistente a la degradación, de mayor pureza y que se traduce en una mayor reducción de la fricción, contribuyendo así al ahorro de combustible y a un menor impacto sobre el medio ambiente.