El buen comportamiento de este modelo se debe principalmente a la avanzada tecnología del chasis, el motor montado longitudinalmente, la tracción trasera, la equilibrada distribución del peso entre los dos ejes y la rigidez torsional de la carrocería. Personalmente, creo que la distancia entre ejes ligeramente más larga va en detrimento de la dinámica en comparación con la variante berlina, pero ganamos en flexibilidad y espacio en el habitáculo.
Gracias al Driving Experience Control con modo ECO PRO, podemos adaptar el carácter general del coche a las condiciones dinámicas de cada momento o, igualmente, a nuestras preferencias personales, centrándonos más en la deportividad o el confort del coche. También podemos elegir un ajuste que nos permita conducir de forma especialmente económica.
Con el Driving Experience Control, se puede ajustar la progresión del acelerador, la velocidad de respuesta del motor, la línea característica de la dirección asistida y el umbral de respuesta del sistema de control de estabilidad DSC.
En el modo SPORT, por ejemplo, el BMW Serie 3 GT responde con mayor espontaneidad a los movimientos del pedal del acelerador. Al mismo tiempo, la dirección se vuelve notablemente más directa. Si el vehículo está equipado con el sistema de navegación Professional, el conductor recibe información actualizada sobre la potencia y el par motor utilizados en cada momento en la pantalla correspondiente del cuadro de instrumentos.
Con el modo ECO PRO es posible conducir de forma especialmente eficiente. Para ello, este modo adapta la línea característica del pedal del acelerador. Aunque se mantiene el mismo recorrido del acelerador, al acelerar se requiere menos potencia que en el modo de conducción normal. Si se activa el modo ECO PRO, también cambia la función del indicador de cambio de marcha óptimo.
Además, el sistema inteligente de gestión de la energía y el clima reduce la potencia mecánica de los sistemas pertinentes suministrando menos energía eléctrica a los dispositivos que consumen energía, como la calefacción de los retrovisores exteriores y la calefacción de los asientos.
Aunque la altura es ligeramente superior a la de una berlina o turismo, no reduce demasiado las cualidades dinámicas y garantiza un control y una estabilidad totales. El paso por curva en esta combinación es excepcional, gracias en parte a la gran rigidez torsional.
De hecho, si eres de los que vacila entre un estilo de carrocería u otro, o simplemente abandonas BMW por una marca que ofrece más espacio, éste es tu coche. Se pueden encontrar unidades en el mercado de coches usados por unos 20.000 euros, así que, ¿por qué no darle una oportunidad?
