El auge de los vehículos eléctricos para la movilidad urbana está impulsando el desarrollo tecnológico. Es el caso de las bicicletas eléctricas, que empiezan a tener mecanismos de automoción.
Poco a poco, el mundo de la movilidad sostenible se está consolidando como un mercado importante en el que las marcas y los fabricantes están apostando a lo grande, respaldados por un notable aumento de las ventas.
Esto, a su vez, está provocando una aceleración del desarrollo de productos, como demuestran los dos nuevos mecanismos lanzados por Shimano y Bosch, dos de las marcas más prestigiosas.
Cambio de marchas automático sin pisar los pedales
El fabricante japonés Shimano, referente en el mundo de la bicicleta desde hace décadas, acaba de presentar la última evolución del popular Deore XT Di2, una versión electrónica para bicicletas eléctricas compatible con la familia de cambios EP6 y EP8.
Este mecanismo aporta dos grandes innovaciones: por un lado, la opción Free Shift permite cambiar de marcha sin necesidad de que el ciclista gire el pedal. Por otro lado, la opción Auto Shift funciona como un cambio de marchas automático. Está disponible con transmisiones de 11 y 12 velocidades.
ABS para bicicletas
Hace más de cuatro décadas, Bosch fue pionera en la introducción de los sistemas de antibloqueo de frenos en los coches, y en 2018 vuelve a ser pionera en las bicicletas eléctricas. Ahora, la marca alemana presenta la evolución de su ABS para este tipo de movilidad sostenible, ganando compacidad y ligereza.
Además, el nuevo ABS de Bosch es compatible con una gama más amplia de bicicletas eléctricas e incluye cuatro modos para adaptar sus prestaciones al tipo de bicicleta que lo monta:
- ABS Trail: para uso en bicicletas de montaña y terrenos más difíciles.
- ABS Cargo: mejora la frenada. Diseñado específicamente para las bicicletas de reparto urbano.
- ABS Touring: diseñado para motos urbanas que circulan por una variedad de superficies típicas de la ciudad.
- ABS Allroad: óptimo para el uso fuera de la carretera en caminos no pavimentados, arena y grava.
Estos modos se pueden activar en cada bici a través de una app móvil, lo que permite al conductor adaptar el ABS a sus necesidades.
Gracias al ABS, el piloto evita el peligro de un frenado excesivo de la rueda delantera, que suele provocar un accidente al pasar por encima del manillar o derrapar en la parte delantera. Según Bosch, el sistema evita el 29% de los accidentes con ciclistas.