Ya sea porque te equivocaste al aparcar en paralelo o porque chocaste contra un bordillo para evitar chocar con otra cosa, tu rueda puede haber sufrido un rasguño. Después de hacer una rápida inspección visual de los daños, tendrás que planificar el siguiente paso. Si una de tus ruedas ha chocado con un bordillo y ha recibido daños, esto es lo que debe esperar.
En primer lugar, comprueba los posibles daños en los neumáticos
Por encima de todo, ten en cuenta tu seguridad y la de tus pasajeros. Si un neumático está seriamente dañado, no intentes conducir con él. Observa atentamente el flanco del neumático y comprueba si está dañado:
- Una protuberancia o burbuja en el flanco significa un daño grave en la estructura del neumático. Si lo notas, conduce con cuidado a tu tienda de neumáticos local, ya que es necesario un reemplazo.
- Las magulladuras y los arañazos pueden ser sólo superficiales, pero es conveniente que un especialista en neumáticos los revise lo antes posible.
- Los desgarros en los flancos, o las abolladuras que han hecho desaparecer el neumático, suelen ser un gran problema. El flanco suele ser la parte más débil de cualquier neumático, por lo que no se puede ignorar ni siquiera un daño menor.
- Cualquier daño cerca del dibujo del neumático puede hacer que el neumático se "salga" de las llantas, así que si notas algo, conduce con cuidado hasta el taller de neumáticos.
En general, los daños en el flanco de un neumático suelen requerir su sustitución. Sin embargo, los neumáticos son bastante duraderos, así que, a menos que haya habido algo de velocidad, el bordillo no debería causar más que un rasguño en el neumático.
Calcular el coste de la reparación de las llantas dañadas
La mayoría de las veces, las llantas se llevan la peor parte de una colisión de coches. El tipo de llantas y la magnitud de los daños son los dos factores que determinarán el coste de la reparación o la sustitución. Cuanto más exótica o lujosa sea la llanta, más cara será la reparación.
Cuatro tipos principales de llantas
Entender el tipo de llanta que tiene es importante si quiere estimar el coste de la reparación de cualquier daño en la llanta.
- Llanta de acero. El acero es duradero y puede soportar muchos daños. Si tienes llantas de acero que están dobladas, intenta llevarlas a un profesional para que las repare. Normalmente se pueden reparar.
- Llanta cromada. Las llantas cromadas dañadas pueden requerir un chorro de arena y un nuevo recubrimiento, que suele ser bastante caro. A menudo es más rentable comprar una llanta cromada de repuesto.
- Llanta de aleación de aluminio. Fabricadas en aleación de aluminio, estas llantas suelen estar disponibles en los coches nuevos. Suelen estar pintados, y a menudo también tienen una capa transparente. Si se doblan, suelen ser difíciles de reparar con seguridad. Si se han rayado o raspado, se pueden lijar y volver a pintar.
- Llantas forradas de plástico. Los revestimientos de plástico suelen tener el mismo aspecto que el cromo, pero son mucho más ligeros (y baratos) para el fabricante. Lamentablemente, no suele ser posible reparar el plástico dañado. En su lugar, puede sustituir la rueda entera o intentar retirar y sustituir el revestimiento de plástico (lo que no siempre es posible).
Resumen: Si tienes una rueda de aluminio, debes lijarla y repintarla. Si tienes una rueda cromada, deberías repintarla o sustituirla. Si tienes una rueda revestida de plástico, probablemente sólo habrá que encontrar un reemplazo. ¿Y si tienes una rueda de acero? Puedes doblarlo de nuevo, pintarlo y seguir tu camino.