Los servicios de emergencia revelan que la batería de 12 voltios es la causa número uno de las averías de los coches en invierno. Esto se debe a que las bajas temperaturas afectan a su rendimiento y también dificultan el giro del motor, aumentando la carga. Pero los errores del conductor también pueden destruir una batería en perfecto estado. Estos son los errores más comunes que debes evitar, sobre todo en invierno.
Los errores más comunes que arruinan la batería de tu coche
El frío es un problema no sólo para las personas, sino también para los vehículos con motor de combustión interna. El aceite del motor y de la transmisión se espesa y esto hace que el motor sea más difícil de girar. Por eso la batería tiene que trabajar más en invierno para arrancar el motor. Por desgracia, también se ve afectada por el frío y su potencia disminuye, lo que dificulta aún más el giro del motor. Esta combinación suele provocar que el motor no arranque y que la batería se muera cuando más la necesitas. Si quieres evitar acabar con tu suministro de 12 voltios en invierno, debes evitar estos errores comunes.
Conducir repetidamente en trayectos cortos
Los viajes cortos repetidos son perjudiciales para el coche, pero la batería es la más afectada. Después de trabajar duro para arrancar el motor en un clima frío, necesita tiempo para recargarse, pero mucha gente sólo conduce el coche durante un corto período de tiempo, no lo suficiente para reponer. En invierno, el conductor también enciende la calefacción de los asientos y el desempañador de las ventanillas, lo que agrava aún más el drenaje. No es de extrañar que la batería se ponga en huelga después de un trato tan poco afectuoso. Si quieres evitar una batería muerta, debes cargarla regularmente con un cargador.
Olvidarse de apagar los consumidores
El error más clásico es olvidarse las luces encendidas durante la noche: seguro que a la mañana siguiente vuelves y te encuentras con que no tienes energía. Los vehículos modernos apagan las luces automáticamente, pero la mayoría de ellos también mantienen la alimentación en los enchufes de 12 voltios, por lo que los consumidores externos pueden agotar la batería. Presta atención a los accesorios que consumen energía incluso cuando el motor no está en marcha. No matarán tu suministro de 12 voltios durante la noche, pero cuando no conduzcas varios días seguidos asegúrate de desconectar todo lo que no sea necesario.
No prestar atención a la suciedad en los bornes de la batería
La suciedad permite que fluyan corrientes de fuga entre los terminales positivo y negativo, descargando gradualmente el acumulador. Los conectores deben mantenerse siempre limpios. De lo contrario, existe riesgo de descarga. Comprueba regularmente los terminales y límpialos si es necesario.
Ignorar las primeras señales de alarma
La batería no muere de forma inesperada. Mucho antes de eso, mostrará señales tempranas que no deben ser ignoradas. Una señal típica es el parpadeo de las luces al arrancar el motor en frío. Un acumulador débil también dificultará el arranque del motor mucho antes de que se rinda por completo. Puedes comprobarlo encendiendo los faros cuando el encendido también está conectado. Si las luces tienden a desvanecerse, es una señal segura de que tu suministro de 12 voltios necesita ser cargado o incluso reemplazado.
Lo que debes hacer para tener una batería feliz
Compra un voltímetro y comprueba el voltaje. Si está por debajo de los 12 voltios, debes recargarla lo antes posible. Cuando conduzcas distancias cortas en invierno, reduce el número de consumidores al mínimo para proteger la batería. Recarga regularmente para evitar una descarga profunda perjudicial. Mejor aún, compra un cargador de goteo especial que también ayude a la desulfatación.