La principal barrera que los usuarios tienen en estos momentos a la hora de adquirir un auto eléctrico sigue siendo el elevado precio de compra frente al de los coches de combustión. Como es normal en la marca rumana, Dacia ha logrado abaratar los costes y lanza el Dacia Spring, un coche eléctrico asequible para el gran público que, si contamos con las diferentes subvenciones como el Plan Moves III, puede quedarse en 9.550 euros. ¿Quieres conocerlo mejor? Pues no te pierdas nuestro artículo.
Un auto realmente pequeño
El Spring es un pequeño auto que puede meterse dentro del grupo de los urbanos con aspecto SUV (B-SUV). Mide 3,73 m de largo, 1,58 de ancho y 1,51 m de alto. Su aspecto de todoterreno hace que en vivo se vea más pequeño de lo que puede parecer en las fotografías, así que cuidado con eso.
En la parte delantera encontramos una parrilla cerrada en la que se sitúa la toma de carga. Esta parrilla tiene un sentido más estético que de refrigeración, ya que no es necesario en un coche eléctrico.
Como suele ser habitual en los B-SUV, los pasos de rueda aparecen muy marcados para reforzar el aspecto off-road, aunque realmente carezca de aptitudes para ese terreno. Sus llantas son de 14 pulgadas y en la trasera encontramos el portón con la palabra electric y el botón de apertura.
Un motor con poca potencia
Si miramos en su interior encontramos una arquitectura muy sencilla. El eje delantero cuenta con un motor eléctrico de 33 kW (44CV) que se alimenta con una batería de 27,4 kWh que ofrece una autonomía de 305 km en ciclo urbano WLTP. Esta batería eléctrica admite carga rápida DC de 30 kW, lo que permite que alcance el 80% de su capacidad en una hora. En una toma doméstica convencional tarda unas 8 horas en alcanzar este 80%.
Un interior muy sencillo
El habitáculo está en la línea de lo que Dacia nos tiene acostumbrados. Es bastante sencillo pero funcional. El volante tiene algunos mandos integrados, como el limitador de velocidad. El puesto de control tras el volante está compuesto por una pantalla de 3,5 pulgadas y a sus lados se encuentra el indicador de energía y el modo de conducción.
Si bien es cierto que estamos ante un coche muy sencillo y poco potente, hay que tener en cuenta que su uso es estrictamente urbano. Desde Dacia ya lo avisaron, no es un coche pensado para largos viajes. Por ese precio no se puede pedir más a un coche eléctrico urbano. Cumple lo que promete, movilidad en la ciudad y poco más.