Existen coches que son únicos por diferentes motivos. Pero si de alguno se puede decir que es irrepetible, este es el Ferrari Breadvan.
El Ferrari 250 GT SWB fue un superdeportivo fabricado por encargo y se le conoció como La Camionnette o Breadvan. Hoy, el estudio Niels van Roij Design ha lanzado una reinterpretación de la mano del Ferrari Breadvan Hommage.
Uno de los primeros one-offs
El Ferrari 250 GT SWB Breadvan nació como un encargo en 1962. Cuando el Conde Giovanni Volpi quiso engrosar su escudería de carreras con un 250 GTO, Enzo Ferrari se negó, y el aristócrata se decidió a modificar un 250 GT SWB para bajarle los humos.
Volpi encargó a uno de los ingenieros responsables del desarrollo del GTO que diese forma a un deportivo capaz de plantar cara a su propia criatura. Como resultado obtuvo un coche más ligero, con mejor reparto del peso y con una peculiar aerodinámica fruto del traslado del motor a la trasera.
A este exclusivo one-off se le apodó como Breadvan debido a la apertura trasera, que recuerda a la de un horno de pan.
La nueva Breadvan
Visto de frente, se podría pensar que se trata de un Ferrari 550 Maranello de 1996 con algún que otro detalle modificado, como las aletas, las tomas de aire en el capó y la burbuja transparente que deja a la vista las trompetas de admisión.
Pero al llegar a la zaga es donde encontramos la sorpresa. Niels van Roij solamente ha dejado el parabrisas. Su voluminosa parte trasera vuelve a recordar al mítico “horno de pan” y a los laterales se han instalado dos grupos ópticos circulares colocados de manera vertical.
En el apartado técnico no se ha modificado gran cosa. Posee el mismo motor V12 atmosférico de 480 CV del Maranello. El único cambio que podemos encontrar son los amortiguadores regulables Koni, un homenaje al Breadvan original, que también los equipaba. Además, calza unas nuevas llantas especiales de 20 pulgadas que montan unos neumáticos Vredestein. ¿Qué te parece el resultado final?
