Durante el confinamiento fueron muchas las dudas que surgieron respecto a la Inspección Técnica de Vehículos. Era imposible realizarlas, así que se establecieron una serie de prórrogas que daban margen a los usuarios.
Hoy, además de las moratorias, hay que tener en cuenta los nuevos protocolos de protección y prevención sanitaria establecidas por las autoridades que se deben cumplir en todos los centros de inspección.
Medidas de seguridad
Aunque toda esta batería de precauciones ralentizan el proceso de la inspección, intentan adaptarse a la situación, minimizando los riesgos para la salud de inspectores y usuarios.
- Cita previa. A través de internet (con Applus o la página web de tu estación habitual) o por teléfono. Es imposible acudir a un centro de ITV y que inspeccionen un vehículo en ese momento. Cuando llegó el desconfinamiento se daba cita para varias semanas, incluso meses, pero actualmente la mayoría de estaciones atienden en un periodo de días, dentro de su horario habitual.
- Aforo. Una de las razones de atender con cita previa es controlar el aforo de personas, limitado al 30% de su capacidad. Aun así, cada oficina tiene unas limitaciones según su tamaño, por lo que puede que a alguien le toque esperar en la puerta manteniendo la distancia de seguridad.
- Pago seguro. Es preferible abonar el precio con tarjeta o algún otro método que no precise de contacto directo.
- Sin contacto. El nuevo manual prohíbe a los inspectores acceder al interior del vehículo, por lo que los usuarios tendrán que actuar a través de las instrucciones que estos les indiquen.
- Mascarilla. Aunque se permanezca en el interior del vehículo, es requisito para poder pasar la inspección sin riesgos.
- Entrega de documentación. Tras realizar la inspección, el usuario deberá permanecer en el vehículo. El inspector se encargará de dar las indicaciones y entregar la documentación de la manera más segura posible.
Prórroga
Debido al cierre por el estado de alarma, la ITV ha ofrecido diferentes prórrogas para, entre otras cosas, facilitar que se puedan realizar las inspecciones a su debido tiempo, contando con una menor fluidez en su funcionamiento debido a las normas de seguridad.
Aunque estos aplazamientos han facilitado la situación para organizar a usuarios y centros de inspección, no afectan a las revisiones de 2021. Por lo tanto, si algún usuario pasa la inspección anualmente, puede encontrarse con un periodo entre la ITV de 2020 y la de 2021 de pocos meses.
La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha denunciado el agravio que puede suponer para muchos usuarios que el tiempo de validez de las inspecciones se acorte durante este año y ha pedido al Ministerio de Industria que mantenga los plazos establecidos entre inspecciones. A esta petición se ha unido la Asociación de Automovilistas Europeos Asociados (AEA).