Los faros de un automóvil son parte de la estética de cualquier vehículo. Marcan de forma muy notoria las líneas frontales y traseras y le permiten lucir un aspecto más o menos deportivo. Pero, sobre todo, cumplen una función vital en términos de seguridad. Gracias a ellos no solo es posible ver la carretera por la que se circula, sino que también garantizan la visibilidad de los coches durante la noche. Sin duda, la aplicación de la tecnología led a la iluminación del automóvil va a suponer un gran avance.
La iluminación del automóvil
A lo largo de los años, los coches han sido dotados de una gran variedad de sistemas de iluminación. Durante años, las bombillas clásicas fueron las más populares. De hecho, siguen instalándose en algunos modelos de gama baja. Sin embargo, la iluminación halógena ha acabado imponiéndose en la mayoría de turismos. Eso sí, las marcas fabricantes de vehículos de alta gama prefirieron apostar por los faros de xenón. La iluminación led nos ofrece una visibilidad similar a esta, pero a un precio más bajo.
Ventajas de los faros led en coches
Los beneficios de usar bombillas led en los faros del automóvil son evidentes:
1. Vida útil muy larga: es superior a cualquier otro sistema de iluminación. De hecho, una bombilla led puede durarnos hasta 15 000 horas sin perder prestaciones.
2. Consumo menor de energía: y, por tanto, mayor durabilidad también de la batería. Con las bombillas led no será tan traumático olvidarnos de apagar las luces al bajar del coche.
3. Luz perfecta para conducir: la luz emitida por las bombillas led es blanca y brillante. Esto garantiza una buena visibilidad sin cansar nuestra vista en exceso.
4. Diseños muy estilizados: sinceramente, no existen otras bombillas capaces de ofrecer unas formas tan variadas y originales como estas.
Inconvenientes de los faros led en coches
Sin embargo, los faros led también tienen algunos contras:
1. Son caros: el gasto inicial es bastante alto. Sin embargo, lo amortizamos con el tiempo al tener que ser sustituidos con menor asiduidad.
2. Peor visibilidad con hielo y agua: este es uno de sus peores inconvenientes, ya que afecta a la seguridad. Otros sistemas ofrecen mejores condiciones en estas situaciones.
3. Elevan la temperatura de los faros: por lo que es necesario usar cristales con filtros especiales para evitar que se derritan y deterioren prematuramente.
4. Menor distancia: los faros de xenón siguen siendo capaces de iluminar más lejos que los led. Eso sí, en distancias cortas, estos últimos son más eficientes.
En definitiva, la elección de los faros de un automóvil es un aspecto clave en materia de estética y seguridad. En este sentido, la iluminación led ofrece una solución duradera, eficiente y original.
