La propuesta del Partido Verde Alemán de introducir límites de velocidad de 130 km/h a partir del 1 de enero ha sido rechazada de manera absoluta en el Bundestag, el Parlamento alemán. Con lo cual, Alemania va a ser el único país de la Unión Europea que no tengan límites de velocidad algunas de sus Autobahn.
Por una vez, todos los partidos políticos alemanes se han puesto de acuerdo en una cosa: no imponer límites de velocidad en el 100 % de las autopistas y autovías alemanas, conocidas como Autobahn.El partido de los Verdes ha argumentado que esta nueva medida que pretenden imponer de rebajar la velocidad máxima a 130 km/h aumentaría la seguridad y reduciría la contaminación emitida por el tráfico rodado. El líder del partido verde dijo: "Cualquiera que quiera hacer que las autopistas sean más seguras y que el tráfico fluya debe introducir un límite de velocidad".
Por otra parte, el Sindicato de Oficiales de Policía Alemanes tachó de "locura" que se pueda circular legalmente a 200 o 250 km/h y aseguró que con un límite de velocidad se podrían evitar muertes en carretera.
En el caso de Alemania, la velocidad libre en algunas Autobahn es sinónimo de libertad, pero también de excelencia en la esfera automotriz; la ingeniería alemana es un sello de identidad y los grupos de presión no están dispuestos a dejar que nadie acabe con ello.
A pesar del rechazo de la propuesta y la percepción generalizada de que todas las autopistas de Alemania no tienen límites de velocidad, alrededor del 30 % tienen un límite de velocidad fijo en todo o parte de las carreteras, principalmente alrededor de las ciudades, según el club de automóviles más grande de Alemania, el ADAC. Además, se aplican límites de velocidad más estrictos en las áreas donde se están realizando obras viales.
Lo cierto es que estos límites están sujetos a la climatología, ya que por ejemplo, tras la brutal ola de calor que azotó Europa este verano, en junio se registraron temperaturas superiores a los 38ºC, algo bastante inusual en Alemania y ante esta ola de calor, el Gobierno alemán decidió reducir el límite de velocidad de forma temporal en algunos puntos hasta los 100 km/h, para evitar que los coches puedan incurrir en situaciones de riesgo debido a problemas de sobrecalentamiento en los neumáticos o en el motor.
La red de carreteras de casi 13.000 kilómetros, no tiene limitaciones de velocidad. Aunque diversas normativas reducen esta en casi la mitad del trazado, y es necesario observar ciertas reglas como la distancia de seguridad, pero de todas formas, sigue habiendo más de 6.500 kilómetros de autopista en los que se puede circular a la velocidad que uno quiera.
Realmente para un país en el que la industria automotriz es tan potente, la ausencia de los límites de velocidad les ayuda a poder desarrollar mejor sus vehículos, pero siempre con los pies en la tierra y deberían de conducirlos a esa velocidad unos pilotos profesionales que estén realmente capacitados a circular en esa ingente velocidad.