Aunque suene como una broma, la ciudad costera se ha puesto de cabeza por un anciano de 79 años. Es el famoso José, un hombre de edad avanzada que, sin embargo, ha causado estragos: la cuota presumiblemente ronda ya el medio millón de euros en daños y perjuicios. Pero eso no es todo, la mecánica de juego de este señor parece pura perversión para sabotear la vida de los lugareños.
El terror de los dueños de coches
Desde el año pasado se conoce que ha rayado más de mil automóviles con el punzón que suele portar. Se para en una calle y de una coge todos los vehículos parqueados para rayarlos uno tras otro. Lo peor es que si alguien lo confronta, este señor se ufana de su delito y hasta ha habido casos en que ha sido sorprendido in fraganti por los dueños de los coches, a los cuales termina agrediendo.
Tan solo en lo que va del 2019, ya se le atribuyen 120 casos de automóviles dañados por alguno de los cuatro frentes durante el mes de enero y siguen contando. Hay incluso casos contados por los vecinos en diversas notas periodísticas y entrevistas que señalan que le rompió las gafas y la nariz a un hombre que intentó ponerle un alto.
El terror del barrio
Además de ser conocido por el daño que hace directamente en los coches, el viejo José Antonio es también conocido en el barrio de O Calvario, su principal zona de acción, como "el señor de los palillos".
Y es que su fama de delincuente y persona indeseable no se limita en las estructuras móviles, también ataca las puertas de los negocios y los portales de edificios con palillos que saturan la ranura para estropear su funcionamiento. Con este sabotaje, los vecinos tienen que llamar continuamente al cerrajero y retrasar sus actividades.
La ley no puede detenerlo
La policía asegura que desde hace 10 años ha sufrido diversas detenciones; sin embargo, ya que sus actividades no están penalizadas con cárcel, no pueden retenerlo por mucho tiempo y únicamente tiene que pagar una multa.
En una de estas detenciones se la practicaron estudios psiquiátricos que confirmaron que no tiene problemas mentales. Esto ha sorprendido incluso a los agentes, pues aseveran que al estar en los calabozos se orina y evacúa encima, aprovechando su postura de "anciano débil y vulnerable", pero con una actitud que parece pura maldad.
Con un kit de armas que incluye, además del punzón y los palillos, una navaja, un bastón y un paraguas, el viejo José Antonio ya ha sido expuesto por los habitantes, quienes están hartos de la mecánica del delincuente y han llenado el barrio con carteles que lo exhiben. ¿Habrá llegado el final del terror de los dueños de coches en Vigo?