El coche tiene su manera de comunicarse con el conductor: los testigos (ya sean luminosos, sonoros o mecánicos) le informan sobre el estado del mismo y le alertan en caso de mal funcionamiento o averías. No intente “desconectar” estas alertas, sería peligroso para el vehículo y también para la seguridad de uno mismo. No hay que olvidar observarlos y escucharlos, además de leer el manual del vehículo, clave para saber interpretarlos, además de cuidar y mantener el automóvil según las indicaciones de quien mejor lo pudo conocer: el fabricante.
Tipos de testigos
Los luminosos quizá son los más importantes de todos. Se ubican en el tablero de instrumentos, junto al velocímetro, para detectarlos y visualizarlos con mayor facilidad. Al arrancar el coche, se encenderán todos los testigos durante algunos segundos. Mientras conducimos, si el testigo está apagado mientras conducimos o de color verde, puede considerarse que está todo correcto. Si su color es amarillo, nos está alertando de que hay algún fallo que debe corregirse lo más pronto posible para evitar averías más graves (y, por tanto, costosas). Si se torna de color rojo, la avería es inminente.
Entre los testigos mecánicos se hallan los medidores de gasolina, velocímetro y el de la temperatura del motor. Es importante prestarle atención a éste último ya que, si la aguja del medidor está demasiado alta (fuera del rango considerado normal), el auto nos está avisando de un sobrecalentamiento, lo que puede provocar que se queme el empaque de la culata o provocar graves daños al motor.
Por último, encontramos los testigos sonoros, no menos importantes. Los más comunes en casi todos los vehículos son los que anuncian que las luces se quedaron encendidas, que hay una (o más) puertas abiertas o el que indica que no llevamos abrochado el cinturón de seguridad (bastante molesto para muchos).
Hagamos un repaso de los testigos luminosos más importantes:
Freno
Cuando el freno de mano está activado, se enciende un piloto luminoso de color rojo en el cuadro de mandos. Pero, cuidado porque si se enciende sin estar éste activado, puede significar que el nivel del depósito del líquido de frenos ha bajado (o incluso una fuga en el sistema) o en autos más modernos puede estar anunciando el cambio de pastillas.
Aceite
Indica una baja presión de aceite en el motor debido a que la bomba de aceite no está funcionando correctamente o a un nivel bajo del lubricante. Si se enciende con el coche en marcha, conviene parar y apagarlo ya que el calor de la fricción puede dar lugar a que las piezas comiencen a fundirse hasta “gripar” el motor.
Batería
Se ilumina siempre que arrancamos el vehículo, indicando que está dando carga para su arranque. Sin embargo, si no se apaga estando el coche en marcha, significa que hay que revisar el estado de la batería o del alternador porque no genera suficiente tensión para cargarla y proporcionar energía a todos los sistemas del coche. En este caso, puede que la batería se descargue por completo incluso en marcha (si el alternador está muy estropeado) y, si se para el motor, no se podrá arrancar.
Airbag
Si se enciende el testigo del airbag es importante ir al concesionario a revisar el sistema con el escáner. Así sabremos si realmente hay alguna avería en los airbags o si se trata de un fallo en alguna de las conexiones (especialmente si se encuentran en los mismos asientos).
ABS
Se enciende cuando el sistema antibloqueo de frenos requiere una revisión y mantenimiento o también indica que hay algún componente de los frenos que no hace su función adecuadamente. En este caso, la avería se suele localizarse en uno de los sensores que miden el giro de las ruedas.
ESP
Parpadea cuando el control de estabilidad interviene frenando selectivamente las ruedas y se enciende totalmente si desactivamos el control de estabilidad o si sufre una avería.
Temperatura de líquido refrigerante
Si el nivel de líquido refrigerante es muy bajo o si el motor se calienta, se encenderá este testigo. No siempre es síntoma de avería, por lo que si bajamos la velocidad, paramos y dejamos que se enfríe el motor, es probable que no tenga consecuencias mayores. Y tampoco hay que olvidar limpiar el radiador.
Anomalía de emisiones
Este icono parpadea si el motor, el sistema de inyección, el de encendido o el de escape fallan. En caso de que parpadee, conviene dejar de acelerar cuanto antes para no dañar ningún componente por sobrecalentamiento. Si se enciende de forma permanente, hay que visitar a un taller para averiguar qué sucede y ponerle remedio.
Presión de aire
Este indicador es propio de vehículos más actuales y del segmento de alta gama. Cuando se enciende significa que la presión de aire de la llanta es más baja de lo habitual. En algunos modelos hasta indica los milibares que ha disminuido.