Si sueñas con recorrer mundo en una furgoneta como la mítica Volkswagen California (quizá más conocida como la furgoneta de los hippies) y que tus únicos gastos sean el carburante y la gasolina (adiós a pagar luz, agua, impuestos…), ¡estás de enhorabuena! Vamos a aprender a “camperizar” una furgoneta (ya sean modelos pequeños o más grandes) en unos pocos días. Para ello necesitarás maña y esfuerzo, bastante paciencia y algo de dinero (sí, pero tampoco mucho). La inversión y la obra merecerán la pena cuando puedas disfrutar de los paisajes más espectaculares y exóticos si te animas a ello.
Contar con una furgoneta
Si ya tienes furgoneta, perfecto. Pero si no, habrás de hacerte con una. Antes de ponernos a la búsqueda, tenemos que pensar en que sus características se ajusten a lo que queremos. Así, si lo que queremos es mayor comodidad y espacio, optaremos por una furgoneta grande. Las pequeñas, en cambio, son menos espaciosas pero más discretas y consumen menos.
También hemos de fijarnos en el motor (si es fuerte, mejor); en si tiene las revisiones hechas y los filtros, aceites, ruedas y correas cambiadas en su momento; en si encontraremos repuestos de ese modelo con facilidad o no y, por supuesto, en que no esté muy “cascada” (podemos pedirle a nuestro mecánico de confianza que la revise antes).
Pueden pasar meses hasta dar con la furgoneta “perfecta” para lo que queremos hacer. Quizá se la compremos por poco dinero a algún conocido que sepamos que la ha tratado bien. Si no tenemos esa suerte, podemos buscar por webs de compraventa de segunda mano como Milanuncios, Vibbo (antes conocido como Segundamano) o Wallapop, además de las que veamos por la calle con el cartel de “Se vende”. En un concesionario seguramente te pedirán más dinero (sea de segunda mano o de Km. 0), lo que encarecería más el proyecto. Algunas de las mejores furgonetas para camperizar son:
- Furgoneta pequeña: Volkswagen Caddy, Citroën Berlingo, Renault Kangoo, Peugeot Partner, Opel Combo o Ford Tourneo.
- Furgoneta mediana: Volkswagen Transporter, Mercedes Vito, Nissan Primastar, Citroën Jumpy, Renault Traffic o Peugeot Expert.
- También se puede hacer con una monovolumen grande como Peugeot 807 o Renault Espace.
Hacer el diseño interior 3D
Una vez tengamos la furgoneta, hay que diseñar el interior, es decir, definir las medidas de los muebles y su distribución. Para ello, el programa Sketchup es ideal. Se trata de un programa de diseño en 3D muy profesional, gratuito y fácil de usar. Este videotutorial va muy bien para comenzar a usar el programa y manejarnos casi como un experto diseñador.
Realizar el aislamiento térmico
Antes de comenzar a montar el mobiliario del interior, hay que aislar el habitáculo. Esto nos servirá para no pasar mucho calor en verano, para mantenernos calientes en invierno e insonorizar el interior. Este paso es mucho más fácil en furgones sin ventanas (furgones industriales).
Se puede aislar de muchas maneras, pero lo más habitual es usar lana de roca (que se puede comprar en cualquier tienda de bricolaje) para partes anchas y para el resto de la furgoneta usar foam auto-adhesivo de fácil colocación (se puede adquirir por rollos de varios metros por Internet, en páginas como Amazon). Por lo general se usa ISOFLEX de 5 o 7 capas para el aislamiento de la chapa (disponible en Leroy Merlin o BricoDepot).
Para ello hay que cubrir perfectamente toda la chapa interior del vehículo, incluso las zonas más pequeñas y de difícil acceso, asegurándonos de que no quede ningún hueco. Hay que pegarlo muy bien con cuidado de que no quede ninguna burbuja de aire dentro. Después, para lograr una mayor eficacia, hay que volver a aislarla con otra segunda capa y hasta con una tercera para conseguir un mínimo de diez centímetros de capa aislante.
Fabricar los muebles
Antes de lanzarnos a fabricar nuestros propios muebles, hemos de calcular el material que necesitaremos: madera, tornillos, bisagras… Así, basándonos en el plano del diseño en 3D que realizamos anteriormente, compraremos lo necesario.
Se recomienda no usar madera pesada y de mala calidad (supone más gasto de combustible y un esfuerzo para la persona que tenga que mover los muebles), sino tableros finos, ligeros y resistentes. Lo mejor es acudir a un Leroy Merlin, ya que te cortan los tableros a medida gratis. Si no tienes muy claro cómo montar los muebles, siempre puedes hacer una búsqueda en Google o YouTube, donde seguro que encuentras muchos tutoriales.
Añadir los últimos (pero necesarios) detalles
Ya tenemos la furgoneta con sus muebles y el aislamiento térmico, pero aún le faltan algunos detalles para terminar de hacer nuestros viajes más cómodos:
- Mini WC (baño químico): para poder hacer nuestras necesidades cómodamente (sobre todo si en el exterior hace frío), podemos instalar un inodoro portátil (algo más pequeños que los de las caravanas). Puedes encontrarlo en Amazon por unos 70€.
- Batería auxiliar 12V: aunque podemos cargar el móvil y la tablet con la batería del coche, es mejor hacernos con una extra por si necesitamos enchufar una pequeña nevera o alguna cosa más.
- Iluminación con tiras LED: necesitaremos ver bien en el interior de la furgoneta por la noche. Las tiras auto adhesivas de LED son perfectas para ello. Podemos ponerlas en el techo. Funcionarán con nuestra batería auxiliar de 12V, las podemos controlar con un mando e incluso cambiarles el color. Podemos encontrar un sistema completo de este tipo de iluminación en Amazon o en tiendas chinas online (como Aliexpress).
Podemos añadir muchos accesorios más según las necesidades y comodidades que tengamos, pero los más básicos y útiles son estos. Lo ideal es estar atentos a las ofertas semanales que lanzan supermercados como Lidl y Aldi y a los chollos que podamos encontrar por Internet.
Ahora ya puedes recorrer mundo y disfrutar de la naturaleza sin prisas, sin agobios y sin estrés.