¿Qué es la Pikes Peak?
Es una de las pruebas de motor más icónicas de Estados Unidos. La Pikes Peak International Hill Climb, o simplemente Pikes Peak, es una carrera cronometrada para coches y motos que consiste en subir a la cima de la montaña Pikes Peak, en el estado de Colorado, en el menor tiempo posible.
La etapa tiene un total de 19,99 kilómetros con 156 curvas desde el inicio hasta la meta. Los participantes, desde que arrancan, no paran de subir hasta completar una ascensión de 1,4 kilómetros sobre el nivel del mar. La media de desnivel durante la prueba es del 7,2%.
La carrera se lleva disputando desde su creación en 1916 y, actualmente, cuenta con una gran variedad de clases de coches, camiones, motocicletas y quads. Durante su historia se han ido añadiendo y quitando categorías cada año y, de media, la participación asciende a 130 pilotos anuales. Entre sus clases está la Unlimited Division, donde compiten súper coches y vehículos diseñados para esta prueba o, por ejemplo, una categoría para coches eléctricos de alto rendimiento.
Desde su creación, y hasta 2011, la ascensión combinaba partes de tierra y de asfalto. Sin embargo, en 2011 se terminó de asfaltar toda la carretera, por lo que ahora no hay variaciones de terreno. Desde el inicio de Pikes Peak, uno de los alicientes es ver si algún participante puede romper el récord de su categoría y alzarse como nuevo rey de la montaña.
Actualmente, el récord absoluto, y de la categoría Unlimited Division, lo tiene Sébastien Loeb en 2013, con su Peugeot 208 R16 Pikes Peak, con un tiempo de 8:13.878.
Aquí os dejamos el video del 2013 del récord absoluto de tiempo con el Peugeot 208 R16.
La subida se celebra cada verano, cuando la nieve de la montaña ya ha desaparecido. La carrera empieza en una zona arbolada a los pies de la montaña y asciende a través de las 156 curvas hasta una zona casi desértica con unas vistas increíbles. El Pikes Peak tiene lo necesario para convertirse en una de las grandes pruebas del automovilismo mundial, pues es espectacular, emocionante y sobre todo muy peligrosa.
La altitud en la que se desarrolla la prueba es un factor muy a tener en cuenta porque tiene efectos muy adversos sobre los pilotos y sobre los coches. A la altura en la que se pilota, no solo el conductor pierde capacidad física por la falta de oxígeno, sino que el vehículo puede llegar a perder hasta un tercio de su potencia. Sin embargo, los equipos compensan esta pérdida con algunos ajustes, como la incorporación de un turbocompresor para que entre más aire y oxígeno al motor y no pierda esa potencia en la carrera.
Dumas en este 2018 tuvo una oportunidad de hacer historia, la bandera verde ondeó y Dumas aprovechó los 640 caballos de fuerza para implementar el ritmo desde los primeros metros. Sus motores eléctricos dieron el resultado esperado y conforme ascendía la montaña no sufría de una disminución de potencia por el cambio de altitud, con lo que finalmente batió el récord de la prueba dejando a Sébastien Loeb en segunda posición. Por último, aquí os dejamos también la interesantísima vuelta con este súper coche eléctrico para que veáis como este piloto ha podido batir y lograr el último récord.