Normalmente estamos acostumbrados a conducir por la derecha de la vía, ¿verdad? Al menos así ocurre en gran parte del mundo salvo en algunos países como Reino Unido, Irlanda, Nueva Zelanda, Australia, Guayana, Surinam, Japón, Tailandia, Malasia, parte del este y sur de África y las islas caribeñas. Entre todos ellos suman un 30% de conductores que circulan por la izquierda, algo que al resto del mundo nos parece raro… y algo complicado.
Si tienes pensado viajar a algún país de los antes citados y vas a conducir, lo mejor es que alquiles un vehículo con el volante a la derecha: es más práctico, ya que la visibilidad en carretera es mejor. Pero claro, ya tenemos interiorizada la forma de conducir de nuestro país, así que hacerlo al contrario, será como volver a la autoescuela. Es muy fácil decir que no hay que ponerse nervioso… y otra cosa muy distinta es hacerlo. Por ello, pon en práctica estos consejos antes de salir de tu zona de confort.
Alquila un coche con el volante a la derecha
Para movernos con total libertad y a nuestro ritmo si viajamos a alguno de estos lugares, alquila un coche con el volante a la derecha para comenzar a adaptarte a él y a las carreteras extranjeras. A poder ser, alquila un vehículo pequeño, puesto que las carreteras en países como Reino Unido o Irlanda son bastante estrechas. Además, un vehículo pequeño nos permitirá maniobrar con más facilidad (cuando aparquemos, por ejemplo), consiguiendo que nos adaptemos mejor y con menos agobios.
Nuestra segunda recomendación es que alquiles un coche automático. Y es que cuando alguien conduce por primera vez un coche con el volante a la derecha y que además es de cambio manual, a la hora de meter las marchas, su mano derecha choca contra el cristal de la ventanilla. La costumbre y nuestro instinto nos dicen que debemos cambiar la marcha con nuestra mano derecha, por lo que a nuestro cerebro puede costarle un gran esfuerzo hacerlo con la izquierda. Con un coche de cambio automático tendrás que olvidarte de las marchas. Si no sabes cómo se conduce este tipo de autos, no te pierdas este artículo.
No olvides contratar un seguro a todo riesgo (o todo riesgo con franquicia, si te parece muy caro) cuando alquiles el vehículo. Al no tener costumbre de conducir por la izquierda ni con este tipo de coches, encontrar el equilibrio entre el arcén y el carril contrario puede ser un poco complicado hasta el punto de poder llevarnos un pequeño susto (meter las ruedas en el arcén, dar un golpe a algún retrovisor…). Con un seguro a todo riesgo te ahorrarás de tener que pagar los costes de cualquier reparación (sea más grande o más pequeña).
Infórmate antes de conducir
Lo nuevo y desconocido no sólo es el cambio de carril y del volante: también cambian los límites de velocidad, los semáforos, la señalización, los tipos de carreteras… además de maniobras que puede que en esos países estén permitidas y en tu país no (o al revés). Cuanta más información tengas, más tranquilo/-a y seguro/-a podrás ponerte al volante de estos autos.
Tendrás que acostumbrarte a leer los indicadores de distancias expresados en millas y no en kilómetros y lo mismo ocurrirá con las señales de límites de velocidad. Así, en carretera podemos encontrar señales con “60” (97 km/h) o “70” (112 km/h) y en ciudad límites de velocidad de “30” (48 km/h, que equivalen a nuestros 50 km/h). ¡Mucho ojo con ellas!
Los semáforos también funcionan de una manera un tanto distinta a como lo hacen en España. La secuencia de luces en los semáforos es la siguiente: ROJO, ROJO+ÁMBAR, VERDE, ÁMBAR, ROJO. El paso del rojo al verde no es tan brusco como en nuestro país, sino que se hace de una forma paulatina para indicarnos que pronto se encenderá la luz verde.
Familiarízate con el auto
Es una obviedad, pero muy necesaria. Hazlo antes de salir del parking. Recuerda que ahora el volante está a la derecha y la palanca del cambio de marchas a la izquierda y los pedales se encuentran en el mismo sitio. Tampoco estaría de más que regules los retrovisores y aprendas a mirar por ellos, ya que el cambio de posición puede descentrarnos también a la hora de mirar por los espejos. Descubre también dónde están el resto de elementos (luces, limpiaparabrisas, ventilación…) para que te sea más fácil localizarlos sobre la marcha.
Practica primero en un aparcamiento o en áreas despobladas
Antes de zambullirnos en el tráfico de una gran ciudad sin haber conducido por la izquierda, es mejor practicar un poco. Si puede ser, intenta recoger el coche en una oficina que esté algo alejada del centro de la ciudad (un aeropuerto, por ejemplo). Aprovecha para tener una primera toma de contacto en el mismo parking del aeropuerto, zonas despobladas o zonas rurales poco frecuentadas. De este modo evitarás el estrés y el nerviosismo de tener que conducir por la izquierda por primera vez en las congestiones de tráfico de las grandes ciudades con sus atascos y largas colas en semáforos.
Mantente siempre a la izquierda
No olvides mantenerte siempre en el carril izquierdo. No te preocupes porque en las zonas con mayor afluencia turística habrá señales que te lo recuerden. Y si se te olvida, sigue a los coches que vayan delante de ti. Además, si llevas copiloto, pídele que te recuerde que circules siempre por el carril izquierdo. Ten en cuenta, además, que por carretera, los adelantamientos se harán por la derecha.
Cuidado con las incorporaciones
Lleva mucho cuidado cuando quieras incorporarte a una carretera girando a la derecha. En este caso, al circular por la izquierda, tu carril será el más alejado, así que presta mucha atención a los vehículos que puedan aproximarse por tu derecha.
Toma las rotondas por la izquierda
No hace falta tirarnos horas y horas dando vueltas dentro de una rotonda en estos países. Es mucho más fácil, ya que en cuanto uno se acerca a la misma, la carretera ya se curva ligeramente hacia la izquierda (en el sentido de las agujas del reloj) y los carriles están bien delimitados. Podrás entrar y salir de ellas sin ningún problema. Eso sí, recuerda siempre girar a la izquierda y ceder el paso a los autos que vienen por la derecha antes de incorporarte.